La nueva campaña de ‘Campofrío »  |
| – Antes de aceptar el puesto, me gustaría que supiera que voy a apuntarme al sindicato… y que voy a robar todo el material de oficina que pueda: libretas, pegamento de barra, incluso cajas de bolis, es que no lo puedo evitar. Cuestionaré su liderazgo en cada reunión y usaré muchos anglicismos que usted no entienda para dejarla en evidencia, por ejemplo: networking, ASAP, feedback… Voy a usar el teléfono de empresa para llamar a mis amigos en Australia que está carísimo, y bueno, cada vez que vea esta foto, pues me reiré del aspecto físico de su familia, porque son muy feos, vaya, pero que usted no está tan mal, vaya que, está bien. – ¡Perfecto! Pues ahora le cuento, no le voy a pagar las horas extras, vale. Se quedará sin ir a la boda de su hermano porque justo ese fin de semana le voy a hacer venir a trabajar. Me apropiaré de sus méritos profesionales y de vez en cuando fingiré que no recuerdo su nombre, bueno, pues para que yo de que… usted sepa quien manda aquí ¿no? – Es Daniel… – ¡Qué más da! Yo ya le pondré un mote. Lo del viernes casual, ¡de casual nada! Usted vendrá vestido con corbata como está mandado. Y por último me aprovecharé de la escasez de ofertas de empleo para no subirle el sueldo en los próximos, tres, cuatro años, ocho… o ¡nunca! – Pues, suena genial ¿cuándo empezamos? – ¡Perfecto! UNA BUENA BASE LO ES TODO Por eso las nuevas pizzas ‘Finíssimas’ de Campofrío tienen una base más fina y crujiente que las hace únicas. |